KANSAS CITY -- El dominicano Tony Peña Jr. volvió con los Reales en esta semana, pero fue solamente por un día.
Peña estuvo en el Kauffman Stadium para lanzar en el bullpen ante el dirigente Trey Hillman y el coach de pitcheo Bob McClure antes de volver a República Dominicana.
El torpedero se convirtió en lanzador poco después de que los Reales lo designaron para asignación el 16 de julio. El club adquirió al cubano Yuniesky Betancourt para jugar en el campo corto, y ya no había cupo para Peña como paracorto.
"Cuando me dijeron que me iban a designar para asignación, Trey había mencionado que podía tener un futuro en el montículo", dijo Peña. "Pero la verdad, durante todos esos moviemientos no estaba prestando mucha atención".
Días después Peña habló con su agente y luego le dijo al gerente general de los Reales Dayton Moore que intentaría ser un lanzador.
Todo salió bien. Fue abridor en dos partidos con el equipo en la liga de novatos en Surprise, Arizona, lanzó en siete ocasiones para el equipo de Clase-A en Burlington y resultó con una salida para la sucursal Triple-A en Omaha. Sus estadísticas en Ligas Menores: 10 juegos, 19 1/3 entradas, 12 hits, cinco carreras limpias, seis pasaportes, 18 ponches, 2.33 de efectividad y marca de 1-2.
Peña, durante sus tres campañas con los Reales, se hizo famoso el 21 de julio del 2008, cuando tuvo que lanzar una entrada en la derrota 19-4 ante los Tigres. Lanzó un episodio perfecto y ponchó al puertorriqueño Iván Rodríguez.
Sin embargo, desde aparecer como el paracorto titular en el 2007, su tiempo de juego y su promedio de bateo han disminuido. Y ahora, a los 28 años de edad, está explorando una nueva fase en su carrera.
"Todo ha salido bien, así que estoy comprometido al 75 por ciento. Iré a la liga instructiva, seguiré trabajando y veremos cómo sigo", explicó Peña.
Luego de un mes en la liga instructiva en Arizona, jugará pelota invernal y posiblemente lanzará con las Aguilas del Cibao.
Como jugador de todos los días, Peña sabe bien lo que piensa un bateador.
"Tengo idea de lo que un bateador trata de hacer, así que puedo confundirlos", declaró el quisqueyano. "Tengo esa ventaja".
Peña estuvo en el Kauffman Stadium para lanzar en el bullpen ante el dirigente Trey Hillman y el coach de pitcheo Bob McClure antes de volver a República Dominicana.
El torpedero se convirtió en lanzador poco después de que los Reales lo designaron para asignación el 16 de julio. El club adquirió al cubano Yuniesky Betancourt para jugar en el campo corto, y ya no había cupo para Peña como paracorto.
"Cuando me dijeron que me iban a designar para asignación, Trey había mencionado que podía tener un futuro en el montículo", dijo Peña. "Pero la verdad, durante todos esos moviemientos no estaba prestando mucha atención".
Días después Peña habló con su agente y luego le dijo al gerente general de los Reales Dayton Moore que intentaría ser un lanzador.
Todo salió bien. Fue abridor en dos partidos con el equipo en la liga de novatos en Surprise, Arizona, lanzó en siete ocasiones para el equipo de Clase-A en Burlington y resultó con una salida para la sucursal Triple-A en Omaha. Sus estadísticas en Ligas Menores: 10 juegos, 19 1/3 entradas, 12 hits, cinco carreras limpias, seis pasaportes, 18 ponches, 2.33 de efectividad y marca de 1-2.
Peña, durante sus tres campañas con los Reales, se hizo famoso el 21 de julio del 2008, cuando tuvo que lanzar una entrada en la derrota 19-4 ante los Tigres. Lanzó un episodio perfecto y ponchó al puertorriqueño Iván Rodríguez.
Sin embargo, desde aparecer como el paracorto titular en el 2007, su tiempo de juego y su promedio de bateo han disminuido. Y ahora, a los 28 años de edad, está explorando una nueva fase en su carrera.
"Todo ha salido bien, así que estoy comprometido al 75 por ciento. Iré a la liga instructiva, seguiré trabajando y veremos cómo sigo", explicó Peña.
Luego de un mes en la liga instructiva en Arizona, jugará pelota invernal y posiblemente lanzará con las Aguilas del Cibao.
Como jugador de todos los días, Peña sabe bien lo que piensa un bateador.
"Tengo idea de lo que un bateador trata de hacer, así que puedo confundirlos", declaró el quisqueyano. "Tengo esa ventaja".