Hanley Ramírez a punto de empujar 100 carreras por primera vez en su joven y brillante carrera.
Desde hace ya un tiempo que el dominicano es considerado uno de los mejores bateadores de Grandes Ligas, pero el ser primer bate en sus primeros tres años en la Gran Carpa limitó su total de impulsadas.
Ahora en el 2009, bateando tercero en el lineup de los Marlins, le está demostrado a todo el mundo lo peligroso que puede ser con corredores en circulación.
Llegando a la serie de la Florida contra los Cardenales en San Luis, el torpedero lleva 99 vueltas remolcadas en 134 partidos, con promedio de .377 con corredores en posición de anotar-una gran mejoría en comparación con .239 la temporada pasada.
Ramírez sabía después del 2008 que para este año estaría haciendo la transición a tercer bate, entonces hizo dos cosas: Aumentó unas 25 libras en la temporada muerta, y de manera consciente intentó convertirse en mejor productor de carreras.
Además del coach de bateo de los Marlins, Jim Presley, Ramírez recibió consejos del Salón de la Fama y asistente especial del equipo, el cubano Tany Pérez.
En el caso de Hanley, no hay mucho que se le pueda enseñar a un bateador de su talento natural, así que Pérez dio énfasis en la paciencia.
"Hay que hacer los ajustes con corredores en posición de anotar, no tratar de siempre sacar la bola", dijo Pérez, quien promedió 96 empujadas por campaña en una carrera de 23 años en Grandes Ligas. "Aún sabe dar jonrones, pero va a ser más productivo para el equipo empujando carreras desde el tercer puesto."
En sus primeros tres años completos en la Gran Carpa, Ramírez promedió 26 cuadrangulares por temporada, pero sus totales de impulsadas fueron de 59, 81 y 67, respectivamente.
Hanley lleva ritmo de 112 empujadas en esta campaña, que sería la novena mayor cantidad en la historia de la franquicia de los Marlins para una temporada. El récord de los Marlins es de Preston Wilson, quien empujó 121 en el 2000.
"Ha mejorado en cada campaña", dijo el manager de los Marlins, el cubano Fredi González. "Le gusta trabajar. Quiere ser bueno. Sus hábitos de trabajo lo van a separar del montón."
De su parte, Ramírez siempre dice que no lee lo que se escribe de él, ni escucha reportes sobre su persona en radio ni televisión.
Entonces, expresó que la empujada 100 no llevan ningún significado especial.
"Sólo trato de hacer mi trabajo", dijo Ramírez. "No trato de hacer demasiado."
"Cada año aprendes algo nuevo", continuó el dominicano. "Fue cuestión de sentirme cómodo."
Desde hace ya un tiempo que el dominicano es considerado uno de los mejores bateadores de Grandes Ligas, pero el ser primer bate en sus primeros tres años en la Gran Carpa limitó su total de impulsadas.
Ahora en el 2009, bateando tercero en el lineup de los Marlins, le está demostrado a todo el mundo lo peligroso que puede ser con corredores en circulación.
Llegando a la serie de la Florida contra los Cardenales en San Luis, el torpedero lleva 99 vueltas remolcadas en 134 partidos, con promedio de .377 con corredores en posición de anotar-una gran mejoría en comparación con .239 la temporada pasada.
Ramírez sabía después del 2008 que para este año estaría haciendo la transición a tercer bate, entonces hizo dos cosas: Aumentó unas 25 libras en la temporada muerta, y de manera consciente intentó convertirse en mejor productor de carreras.
Además del coach de bateo de los Marlins, Jim Presley, Ramírez recibió consejos del Salón de la Fama y asistente especial del equipo, el cubano Tany Pérez.
En el caso de Hanley, no hay mucho que se le pueda enseñar a un bateador de su talento natural, así que Pérez dio énfasis en la paciencia.
"Hay que hacer los ajustes con corredores en posición de anotar, no tratar de siempre sacar la bola", dijo Pérez, quien promedió 96 empujadas por campaña en una carrera de 23 años en Grandes Ligas. "Aún sabe dar jonrones, pero va a ser más productivo para el equipo empujando carreras desde el tercer puesto."
En sus primeros tres años completos en la Gran Carpa, Ramírez promedió 26 cuadrangulares por temporada, pero sus totales de impulsadas fueron de 59, 81 y 67, respectivamente.
Hanley lleva ritmo de 112 empujadas en esta campaña, que sería la novena mayor cantidad en la historia de la franquicia de los Marlins para una temporada. El récord de los Marlins es de Preston Wilson, quien empujó 121 en el 2000.
"Ha mejorado en cada campaña", dijo el manager de los Marlins, el cubano Fredi González. "Le gusta trabajar. Quiere ser bueno. Sus hábitos de trabajo lo van a separar del montón."
De su parte, Ramírez siempre dice que no lee lo que se escribe de él, ni escucha reportes sobre su persona en radio ni televisión.
Entonces, expresó que la empujada 100 no llevan ningún significado especial.
"Sólo trato de hacer mi trabajo", dijo Ramírez. "No trato de hacer demasiado."
"Cada año aprendes algo nuevo", continuó el dominicano. "Fue cuestión de sentirme cómodo."