La vara de la justicia en los Estados Unidos parece que se reducirá para unos y se ampliará para otros.La vara de la justicia en los Estados Unidos parece que se reducirá para unos y se ampliará para otros.
Por ejemplo, Miguel Tejada, la Guagua Banileja, es el único jugador de Grandes Ligas que ha sido formalmente “juzgado” por el asunto de los esteroides y la famosa lista de la que sólo se sacan nombres hispanos, en particular dominicanos.
Un juez (¿) juzgó a Miguel Tejada, en pleno juicio lo acusó el mismo juez, lo insultó, lo amenazó y finalmente lo condenó a prestar servicios a la comunidad. Antes, lo amenazó con encarcelarlo y, en último caso, en deportarlo.
Aquél, lleno de ira, de furia, de odio y desprecio hacia el hispano negro pero famoso y millonario no parecía actuar como un juez sino como un fiscal loco, un abogado acusador y perverso o como un sádico verdugo.
Es esa misma justicia la que emprende y enfoca sus cañones contra un mulato llamado Alex, un negro pajonú llamado Manny, un prieto gringo de nombre Barry, un negro bembón conocido como el “Big Papi”, y así por el estilo.
Jamás se ha vuelto a mencionar al blanquito llamado el Cohete, el rubio conocido como el Giambino o el cubano con suerte antifidelista llamado Rafi.
¿A qué viene este artículo y la famosa vara larga y vara corta de una justicia ciega para unos y con 4 ojos para otros?
Ya escribí acerca del súper atleta de natación Michael Phelps, máximo héroe de los Juegos Olímpicos de Pekín, que fue sorprendido, firmado y él convicto y confeso de estar en una orgía usando drogas.
Un juez dijo que nada se haría contra él (los mismos de los líos de los esteroides y la “lucha” contra las drogas) porque “el señor Phelps es un héroe deportivo de los Estados Unidos”. Palabras textuales y en boca de uno de esos jueces tan severos, celosos y amenazantes.
El caso es que Michael Phelps estaba el otro día manejando… ¡borracho! Por causa del alcohol, provocó un accidente en el que por poco muere gente inocente.
Los policías que intervinieron en el caso, por poco le piden excusas al héroe deportivo USA, mientras un juez volvió a repetir lo del juez de las drogas.
Estamos en presencia de un atleta que tiene licencia para consumir drogas en público, manejar borracho… y que nada pase.
¡No me jodan con los esteroides y la doble moral! Fuente/elmetrodigital.com
