• Yankees firmaron al receptor dominicano Sánchez• Atléticos firmaron a tres prospectos venezolanos• Mets de Nueva York firman al hijo de Ugueth UrbinaEl draft amateur atrae mucha atención entre los fanáticos de Grandes Ligas en Estados Unidos y Canadá.
Pero hay todo un mundo aparte de ese procesi. Cerca del 40% de los jugadores afiliados a Grandes Ligas o liga menor nacieron fuera de los 50 estados de EE.UU. Y con la excepción de Canadá y Puerto Rico, cuyos jóvenes están sujetos al draft oficial, los demás vienen del resto del mundo, y son parte del período de firmas que comenzó el día 2 de este mes.
"Es uno de los medios importantes para adquirir talento", dijo el gerente general de los Piratas, Neal Huntington, cuyo club ha tratado de ser más activo en el plano internacional, sobre todo con su nueva academia en la República Dominicana. "Seremos agresivos con los jugadores que queremos y trataremos de agregar jugadores del mercado internacional, particularmente en América Latina."
Al igual que en el draft oficial, el dinero gastado en este mercado ha ido en ascenso, con cada vez más jugadores expandiendo su búsqueda de talento fuera de EE.UU. El año pasado, los Atléticos dieron un monto récord al firmar al lanzador dominicano Michael Ynoa por US$4.25 millones.
"Se ha explotado, ciertamente. Los jugadores que recibían US$75,000 ahora valen US$500,000, y los que US$500,000 ahora son de US$1.2 millones", dijo Huntington. Como todo pelotero a quien le vayas a dar ese tipo de dinero, estudias la calidad y la cantidad de las informaciones que tienes y tomas la mejor decisión."
Claro, más fácil decirlo que hacerlo. Por ejemplo, si un equipo selecciona a un jugador del draft oficial, lo más seguro es que lo hayan visto jugar bastante. Cuando los Piratas eligieron al neoyorquino de ascendencia dominicana Pedro Álvarez en el 2008, lo venían siguiendo desde sus tiempos en la escuela secundaria, hasta su gran actuación con la Universidad de Vanderbilt.
A nivel internacional, los escuchas tienen que hacer un mayor esfuerzo por ver a los prospectos en las academias, y tomar una decisión después de dos o tres sesiones.
"Muchos más equipos tienen presencia (en América Latina) ahora", dijo Huntington. "Entonces, el 2 de julio es casi como un draft internacional. Hay mucha atención y presión para hacer un anuncio de una firma de mucho dinero para demostrarles a los fans que estás siendo activo."
Mientras muchos prospectos ya han acordado pactos con equipos de Grandes Ligas, el que la gente pensaba que tenía posibilidades de acercarse a lo que recibió Ynoa no ha firmado. Se trata del torpedero dominicano Miguel Angel Sanó, considerado por muchos el joven de más talento en el mercado, junto a Wagner Mateo, quien pactó con los Cardenales.
La mayoría de los escuchas proyectan a Sanó como un tercera base o jardinero derecho en el futuro, pero todos coinciden en que tiene un gran bate y un excelente brazo. Se ha especulado que los Piratas, Orioles y tal vez Mellzos son los finalistas para procurar sus servicios.
Hay par de razones por las que aún no firma Sanó. La primera es lo que se necesitará para ficharlo. El dinero podría acercarse a lo que recibió Ynoa, sobre todo si hay una guerra de ofertas entre múltiples equipos. Pero antes de eso, la mayoría de los equipos quieren ver qué pasa con la investigación de MLB sobre la verdadera edad de Sanó, algo que debe completarse la próxima semana.
Mientras tanto, los Cardenales firmaron al cotizado jardinero dominicano Wagner Mateo por lo que se ha informado en US$3.1 millones. Mateo era conocido por muchos, ya que participó en la Serie Mundial RBI en el 2007 y el 2008, y participó en campamentos en la Florida y Arizona en la primavera de este año.
"Fue bien evaluado, y jugó a un alto nivel", dijo el gerente general de los Cardenales, John Mozeliak, cuando se anunció la firma. "El poder ver lo que hizo y que tantas personas lo vieran, eso ayudó a que tuviéramos la confianza de buscarlo agresivamente."
Los Yankees, nunca tímidos en el mercado internacional (firmaron a Alfonso Soriano en 1998 por US$3.1 millones al taiwanés Chien-Ming Wang por US1.9 millones en el 2000, por ejemplo), ficharon al receptor dominicano Gary Sánchez por lo que se ha informado fueron US$3 millones, además de pactar por dos quisqueyanos más, el torpedero Damián Arredondo por US$850,000 y el derecho Chris Cabrera por US$400,000.
El mercado global
Algunas de las firmas internacionales más importantes hasta ahora en el 2009.
Otras firmas de US$1,000,000 o más: El jardinero dominicano Guillermo Pimentel con los Marineros y el torpedero quisqueyano José Vinicio con los Medias Rojas, por US$2 millones cada uno; el zurdo venezolano Juan Urbina, hijo del ex ligamayorista Ugueth Urbina, con los Mets por unos US$1.25 millones; el tercera base nicaragüense Chélsor Cuthbert (Reales) y el paracorto venezolano Luis Sardiña (Rangers), quienes recibieron cerca de US$1.2 millones cada uno. Para los Rangers, Sardiña fue uno de varias firmas, ya que han sido uno de los equipos más activos en el mercado internacional en los últimos años.
Aparte de Canó, ahora el mayor nombre que aún no firma es el zurdo cubano Aroldis Chapman, quien ha sido comparado con Stephen Strasburg, primera selección del draft (Nacionales) que tiene una recta medida en 102 millas por hora.
Se informó que Chapman desertó de la selección cubana en Holanda la semana pasada. Tendrá hasta seis meses para establecer residencia en algún país, y una vez que lo haga, sus servicios podrán ir al mejor postor. Considerado el mayor talento que deserta de Cuba desde José Contreras en el 2002, Chapman podría exigir por lo menos un dinero similar al del pacto de cuatro años y US$32 millones que le dieron los Yankees a Contreras en el 2003.
Aparte de Chapman, se trata de adolescentes que están lejos de estar en Grandes Ligas a esta altura. Pero un vistazo a los rosters del Juego de Estrellas del 2009 nos da una idea de lo que pueden lograr en un futuro.
El venezolano Félix Hernández firmó con los Marineros por US$710,000 en el 2002; el dominicano Miguel Tejada fichó con los Atléticos en 1993, antes de la explosión de los bonos, por apenas US$2,000; y el cerrador de los Mets, el venezolano Francisco Rodríguez, se unió a la organización de los Angelinos en 1998 por US$900,000.
Otras firmas internacionales en el Clásico de Media Temporada de esta campaña son Ichiro (un caso distinto, ya que firmó en el 2000 como profesional establecido en Japón), el panameño Mariano Rivera (1990), el venezolano Víctor Martínez (1996), el dominicano Hanley Ramírez (2000), el quisqueyano Francisco Cordero (1994) y el venezolano Johan Santana (1995).
Y dos figuras importantes no en el Juego de Estrellas son el venezolano Miguel Cabrera, que firmó con los Marlins por US$1.9 millones en 1999 y el dominicano José Reyes, quien fichó por apenas US$200,000 en el 2000.
No todas las firmas internacionales representan un éxito, pero los ejemplos citados demuestran el porqué los equipos están dispuestos a arriesgarse.
"Es muy importante hacer lo que estamos haciendo, y tenemos que hacerlo para ser exitosos", dijo Huntington. "Si el jugador indicado está ahí, seremos agresivos. En algunos casos, acertaremos, en otros no tanto."
Pero hay todo un mundo aparte de ese procesi. Cerca del 40% de los jugadores afiliados a Grandes Ligas o liga menor nacieron fuera de los 50 estados de EE.UU. Y con la excepción de Canadá y Puerto Rico, cuyos jóvenes están sujetos al draft oficial, los demás vienen del resto del mundo, y son parte del período de firmas que comenzó el día 2 de este mes.
"Es uno de los medios importantes para adquirir talento", dijo el gerente general de los Piratas, Neal Huntington, cuyo club ha tratado de ser más activo en el plano internacional, sobre todo con su nueva academia en la República Dominicana. "Seremos agresivos con los jugadores que queremos y trataremos de agregar jugadores del mercado internacional, particularmente en América Latina."
Al igual que en el draft oficial, el dinero gastado en este mercado ha ido en ascenso, con cada vez más jugadores expandiendo su búsqueda de talento fuera de EE.UU. El año pasado, los Atléticos dieron un monto récord al firmar al lanzador dominicano Michael Ynoa por US$4.25 millones.
"Se ha explotado, ciertamente. Los jugadores que recibían US$75,000 ahora valen US$500,000, y los que US$500,000 ahora son de US$1.2 millones", dijo Huntington. Como todo pelotero a quien le vayas a dar ese tipo de dinero, estudias la calidad y la cantidad de las informaciones que tienes y tomas la mejor decisión."
Claro, más fácil decirlo que hacerlo. Por ejemplo, si un equipo selecciona a un jugador del draft oficial, lo más seguro es que lo hayan visto jugar bastante. Cuando los Piratas eligieron al neoyorquino de ascendencia dominicana Pedro Álvarez en el 2008, lo venían siguiendo desde sus tiempos en la escuela secundaria, hasta su gran actuación con la Universidad de Vanderbilt.
A nivel internacional, los escuchas tienen que hacer un mayor esfuerzo por ver a los prospectos en las academias, y tomar una decisión después de dos o tres sesiones.
"Muchos más equipos tienen presencia (en América Latina) ahora", dijo Huntington. "Entonces, el 2 de julio es casi como un draft internacional. Hay mucha atención y presión para hacer un anuncio de una firma de mucho dinero para demostrarles a los fans que estás siendo activo."
Mientras muchos prospectos ya han acordado pactos con equipos de Grandes Ligas, el que la gente pensaba que tenía posibilidades de acercarse a lo que recibió Ynoa no ha firmado. Se trata del torpedero dominicano Miguel Angel Sanó, considerado por muchos el joven de más talento en el mercado, junto a Wagner Mateo, quien pactó con los Cardenales.
La mayoría de los escuchas proyectan a Sanó como un tercera base o jardinero derecho en el futuro, pero todos coinciden en que tiene un gran bate y un excelente brazo. Se ha especulado que los Piratas, Orioles y tal vez Mellzos son los finalistas para procurar sus servicios.
Hay par de razones por las que aún no firma Sanó. La primera es lo que se necesitará para ficharlo. El dinero podría acercarse a lo que recibió Ynoa, sobre todo si hay una guerra de ofertas entre múltiples equipos. Pero antes de eso, la mayoría de los equipos quieren ver qué pasa con la investigación de MLB sobre la verdadera edad de Sanó, algo que debe completarse la próxima semana.
Mientras tanto, los Cardenales firmaron al cotizado jardinero dominicano Wagner Mateo por lo que se ha informado en US$3.1 millones. Mateo era conocido por muchos, ya que participó en la Serie Mundial RBI en el 2007 y el 2008, y participó en campamentos en la Florida y Arizona en la primavera de este año.
"Fue bien evaluado, y jugó a un alto nivel", dijo el gerente general de los Cardenales, John Mozeliak, cuando se anunció la firma. "El poder ver lo que hizo y que tantas personas lo vieran, eso ayudó a que tuviéramos la confianza de buscarlo agresivamente."
Los Yankees, nunca tímidos en el mercado internacional (firmaron a Alfonso Soriano en 1998 por US$3.1 millones al taiwanés Chien-Ming Wang por US1.9 millones en el 2000, por ejemplo), ficharon al receptor dominicano Gary Sánchez por lo que se ha informado fueron US$3 millones, además de pactar por dos quisqueyanos más, el torpedero Damián Arredondo por US$850,000 y el derecho Chris Cabrera por US$400,000.
El mercado global
Algunas de las firmas internacionales más importantes hasta ahora en el 2009.
Otras firmas de US$1,000,000 o más: El jardinero dominicano Guillermo Pimentel con los Marineros y el torpedero quisqueyano José Vinicio con los Medias Rojas, por US$2 millones cada uno; el zurdo venezolano Juan Urbina, hijo del ex ligamayorista Ugueth Urbina, con los Mets por unos US$1.25 millones; el tercera base nicaragüense Chélsor Cuthbert (Reales) y el paracorto venezolano Luis Sardiña (Rangers), quienes recibieron cerca de US$1.2 millones cada uno. Para los Rangers, Sardiña fue uno de varias firmas, ya que han sido uno de los equipos más activos en el mercado internacional en los últimos años.
Aparte de Canó, ahora el mayor nombre que aún no firma es el zurdo cubano Aroldis Chapman, quien ha sido comparado con Stephen Strasburg, primera selección del draft (Nacionales) que tiene una recta medida en 102 millas por hora.
Se informó que Chapman desertó de la selección cubana en Holanda la semana pasada. Tendrá hasta seis meses para establecer residencia en algún país, y una vez que lo haga, sus servicios podrán ir al mejor postor. Considerado el mayor talento que deserta de Cuba desde José Contreras en el 2002, Chapman podría exigir por lo menos un dinero similar al del pacto de cuatro años y US$32 millones que le dieron los Yankees a Contreras en el 2003.
Aparte de Chapman, se trata de adolescentes que están lejos de estar en Grandes Ligas a esta altura. Pero un vistazo a los rosters del Juego de Estrellas del 2009 nos da una idea de lo que pueden lograr en un futuro.
El venezolano Félix Hernández firmó con los Marineros por US$710,000 en el 2002; el dominicano Miguel Tejada fichó con los Atléticos en 1993, antes de la explosión de los bonos, por apenas US$2,000; y el cerrador de los Mets, el venezolano Francisco Rodríguez, se unió a la organización de los Angelinos en 1998 por US$900,000.
Otras firmas internacionales en el Clásico de Media Temporada de esta campaña son Ichiro (un caso distinto, ya que firmó en el 2000 como profesional establecido en Japón), el panameño Mariano Rivera (1990), el venezolano Víctor Martínez (1996), el dominicano Hanley Ramírez (2000), el quisqueyano Francisco Cordero (1994) y el venezolano Johan Santana (1995).
Y dos figuras importantes no en el Juego de Estrellas son el venezolano Miguel Cabrera, que firmó con los Marlins por US$1.9 millones en 1999 y el dominicano José Reyes, quien fichó por apenas US$200,000 en el 2000.
No todas las firmas internacionales representan un éxito, pero los ejemplos citados demuestran el porqué los equipos están dispuestos a arriesgarse.
"Es muy importante hacer lo que estamos haciendo, y tenemos que hacerlo para ser exitosos", dijo Huntington. "Si el jugador indicado está ahí, seremos agresivos. En algunos casos, acertaremos, en otros no tanto."